martes, 18 de mayo de 2021

EL OBISPO IPOLT


parte del clero alemán está confundido

Brújula cotidiana, 17-05-2021

 

“En Alemania, toda la antropología cristiana se tambalea. Es lamentable que la teología del cuerpo de San Juan Pablo II sea poco conocida. También necesitamos un nuevo lenguaje y de un nuevo perfil de nuestras posiciones éticas para orientar a las personas y salvarlas de la confusión”. Habla monseñor Ipolt, obispo de Görlitz.

Querían hacer ruido, pero provocaron un silencio ensordecedor. A casi una semana de la jornada de bendiciones colectivas abierta también a las parejas homosexuales, todavía faltan las reacciones oficiales sobre la iniciativa de protesta contra el Responsum de la Congregación para la Doctrina de la Fe. El Foro de los Católicos Alemanes invocó un castigo a los sacerdotes rebeldes por parte de los obispos a través de las palabras de su portavoz, Hubert Gindest, según las cuales la ausencia de sanciones hará surgir entre los fieles “la opinión de que las disposiciones de la Congregación para la Doctrina de la Fe se pueden ignorar y que todos pueden hacer una doctrina moral de la Iglesia a la medida”.

También hay quienes, como el canonista Gero Weishaupt, si bien considera posible el castigo de los sacerdotes que se han sumado a la campaña #liebegewinnt, sostiene que es “inapropiado” porque “el derecho penal eclesiástico se caracteriza por el principio de clemencia”. En resumen, el caos parece reinar soberano en la Iglesia alemana que lidia con vientos de cisma nunca tan fuertes. Los mismos líderes de la Conferencia Episcopal utilizaron un tono más molesto por la publicación del Responsum que para distanciarse de las bendiciones colectivas del pasado lunes. Las voces de los obispos alemanes, sin embargo, no van al unísono. La Brújula Cotidiana recogió el testimonio de monseñor Wolfgang Ipolt, obispo de Görlitz, sobre la difícil situación de la Iglesia en Alemania.

 

Excelencia, usted fue uno de los obispos alemanes que acogió el Responsum de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Otros lo criticaron. ¿Lo esperaba de sus hermanos?

El Responsum de la Congregación para la Doctrina de la Fe ha aclarado una cuestión práctica, litúrgica y pastoral. Sin embargo, en mi opinión, debería haberse elegido una forma diferente, que sin duda habría tenido una mejor acogida. El Responsum es una aclaración que se produce mientras se llevan a cabo celebraciones de bendiciones similares durante mucho tiempo en varios lugares de Alemania. Esta es sin duda la razón por la que las protestas son fuertes en algunas regiones de nuestro país. Además, se abordan directamente cuestiones relativas a la moral sexual de la Iglesia, que sin duda requieren un estudio más profundo.

 

¿Qué responde a los muchos que, en estos días, cuestionan el contenido del documento argumentando que la Iglesia no puede bendecir motos y coches, mientras se niega a hacerlo con las parejas homosexuales?

Como Iglesia, estamos ante todo vinculados al testimonio de las Sagradas Escrituras y a la enseñanza constante de la Tradición. Las personas que se sienten homosexuales obviamente pueden ser bendecidas, pero su relación no puede serlo. Por ejemplo, siempre son bendecidos cuando asisten a la Santa Misa. Aquí, sin embargo, se trata de intentar equiparar de algún modo su unión con el matrimonio, como ya ha sucedido en muchas sociedades occidentales a través de la legislación estatal, y de bendecirlas con un rito solemne. Un deseo de partnership tan vinculante es una señal de que las personas quieren responsabilizarse mutuamente. Puedo respetarlo.

 

Pero una celebración litúrgica oficial de la Bendición indudablemente daría lugar a confusión con el matrimonio eclesiástico. Por eso, desde mi punto de vista, no puede haber una ceremonia oficial de bendición para esas parejas.

 

Miles de sacerdotes católicos desafían al Vaticano y también bendicen públicamente a numerosas parejas del mismo sexo. ¿Deberían ser castigados? ¿Cree que esta rebelión causará confusión entre los creyentes?

Toda la antropología cristiana se tambalea. En primer lugar, hablo en nombre de Alemania. En las últimas décadas, la Iglesia no ha entendido completamente cómo presentar y transmitir el valor y el significado de su moral sexual. En particular, es lamentable que la teología del cuerpo de San Juan Pablo II sea poco conocida en Alemania. Sí, hoy también necesitamos un nuevo lenguaje y de un nuevo perfil de nuestras posiciones éticas para orientar a las personas y salvarlas de la confusión.

 

La mayoría de estas protestas tuvieron lugar en el noroeste del país. ¿También hubo bendiciones en la diócesis de Görlitz?

No ha habido protestas en mi diócesis. Aquí los cristianos viven en la diáspora y, que yo sepa, no ha habido católicos homosexuales que hayan pedido una bendición.

 

¿Tiene miedo de un cisma en la Iglesia alemana?

Confío en que el Espíritu Santo acompañará siempre a la Iglesia y nos ayudará a encontrar una salida a algunas aporías y contradicciones, para que no lleguemos a la división sino más en profundidad a la verdad.

 

El camino sinodal: ¿hacia dónde va en realidad?

Esta es una buena pregunta a la que no puedo responder en este momento. Por el momento una respuesta al “¿hacia dónde se va?” aún no se ve en el horizonte. Espero que el camino sinodal permita a Alemania reconocer más profundamente que no somos el centro del mundo, sino parte de la Iglesia universal. Esto es lo que quiso decir el Papa Francisco cuando nos recordó el “sensus Ecclesiae” en su carta del 29 de junio de 2019, al comienzo del camino sinodal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario